Hace algún
tiempo conocí a Timothy, inexpresivo, casi transparente pero siempre allí, como
el amigo invisible que tuve cuando era niño, apenas tenia 4. Quien me salvo
de una critica situación: nadie me hacia caso!!!
Ya
grandecitos nos volvimos a ver en la universidad. Él había cambiado un poco,
pero poco se notaba, la verdad poco se veia, nunca supe porque?
Lo recuerdo
mucho de varios eventos en los que participamos juntos, carnavalescos,
manifestaciones religiosas y hasta eventos deportivos.
Un amigo
como Timothy es indispensable para todos, su incondicional lealtad a uno mismo,
lo hace imprescindible tener cerca. Su disposición de oír, cuando los primos no
escuchan. Su interés intelectual en lo que dices, cuando tu compañero(a), esta rescribiendo
un texto de hace 5 o 15 años. Cuando tus padres no entienden nada… él es
perfecto eco de tus instintos y deseos… tenlo siempre cercano.
O, háztelo
de papel mannche!!!
Inclusive,
cuando él tiene sus propios compromisos, como casarse, y uno lo necesita, el, sin duda, viene ha estar
contigo, con solo con chistar los dedos.
Foto con su compañera!!!
La última
vez que lo vi, sucedía un gran evento-rencuentro
entre los hermanitos Lopecitos-Durancitos, quienes vinieron de todas partes del planeta para “estar
juntos” en una actividad un poco extraña.
Con apasionado masoquismo, correr por 4 o 5 horas, sin verse ni hablarse entre ellos, por un largo rato, solo para al final, decir cada uno por su cuenta: que les dolía mucho!
Con apasionado masoquismo, correr por 4 o 5 horas, sin verse ni hablarse entre ellos, por un largo rato, solo para al final, decir cada uno por su cuenta: que les dolía mucho!
Fue pues en esos días, en que no le
paran a uno, que vi a Timothy por ultima vez. Estuve con el, compartimos muchas
cosas, caminamos, cantamos, comimos, corrimos… mientras Fabiolita y Danielito,
no paraban de hablarse el uno al otro, en tremendo
campeonato, de quien decía mas cosas en menos tiempo, sin importar la ilación
de la conversa.
Así pues,
Timothy, apareció y desapareció, para más
tarde enterarme de que había ido a Vancouver al rescate de Carolina Canache, quien padecia de unos males como el mio.
Esta es pues la historia de Timothy Rice, quien
como yo, todos debemos tener uno, sobre todo en los momentos difíciles, hasta
universidades con su nombre se jallan!!!
Los ultimos recuerdos con el:
Paseandolo!!!
Atravesando a Cruz Diez!!!
En el Parque!!!
En el cine, con el y ella!!!
Hasta Daniel necesitado de el... estuvo!!!
Gran tipo este Timothi. Me cayó super bien. Aunque me confesó que estaba un poco cansado de Pelayo. Que era muy pesado y que por eso se iba a Vancouver a ver si otra persona menos cansina requería de su compañía.
ReplyDeleteCasiel, manifiestate
DeleteMe cuenta Timothi que se hizo pasar por Carolina y corrió el medio maratón de Vancouver por ella. Ahora se explica el espectacular tiempo de 2h:19m.
ReplyDeleteCasiel, y por quien te haces pasar tu?
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